Breve Historia de la Banda Municipal de Música de Cáceres IX

IX. D. Antonio Curiel Cáceres (1968-1980)

Antonio Curiel, era saxofonista por concurso de la banda, había pasado por todas las categorías hasta convertirse con Francisco Cebrián en subdirector y profesor de saxofón. 

Como recoge el Reglamento de Régimen Interno de la Banda Municipal de 1949, los músicos de 1ª y 2ª había adquirido tal categoría por concurso y antigüedad y tras la partida de Cebrián, tendrá la suficiente puntuación como para acceder a la dirección de la banda.

Procesión Cívica de San Jorge 1969

San Jorge, 1969

La Banda posa con el alcalde, Sr. Bustamante y su director, don Antonio Curiel, en las escalinatas del Ayuntamiento con motivo del estreno de los nuevos uniformes de 1971,

 En el pregón de la Semana Santa de 1974, la Banda Municipal dirigida por el maestro Curiel interpretó "Marcha Fúnebre", de Sors, "Jesús Preso", de E. Cebrián, y "Requiem Aeternam” de Miranda y Lafuente, para amenizar la intervención del señor Entrena [1].

Curiel, por diferentes razones, renunció al puesto de director en 1974. D. Alejandro Fernández Sastre (Méntrida 1930 - ) ganó el concurso libre que abrió el ayuntamiento para cubrir la plaza de director, pero a los pocos meses aprobó una plaza de director militar pasando a la Academia General de Toledo con el grado de Capitán y más tarde al Tercio Móvil de la Guardia Civil.

Antonio Curiel (1974-1980)  tiene que volver a ponerse al frente de la banda mientras se busca otro director.

El 20 de marzo de 1975, la banda de música municipal, habitual invitada al pregón de Semana Santa, interpreta este año las marchas “La Santa Cena”, “Cristo de la Sangre” y “El Miserere”, obra del compositor valenciano Manuel Serrano que se estrenaba con motivo de tan ilustre ocasión.

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[1] http://www.caceresenochodias.com/2012/02/112.html

Breve Historia de la Banda Municipal de Música de Cáceres VIII.

VIII. D. Francisco Cebrián Ruiz (1953-1968).

Se puede considerar junto con Santiago Berzosa, el director de la Banda Municipal que más influyó en la música cacereña del S. XX.

Francisco Cebrián (Toledo 1912-Jaén 1999) era el hermano menor de Emilio Cebrián Ruiz, célebre por sus composiciones para banda. Sin embargo Francisco Cebrián en su larga trayectoria profesional se ha dedicado a la formación y dirección de bandas de música [1]. 

Formado en el Real Conservatorio de Música de Madrid con B. García de Parra, E. Vegas y J. E: Gasca, entró en 1941 en el Cuerpo de Directores de Bandas Civiles. Fue director de las siguientes bandas: Militar del Regimiento de Automovilismo y de Transmisores de Madrid, Municipal de Montealegre del Castillo (Albacete, 1941-1942), Ayamonte (Huelva), Utiel (Valencia, 1952), Primitiva de Liria (Valencia, 1943-1949), Cáceres (1953-1968) y Diputación de Murcia [2] (1969 hasta su jubilación en 1982, desapareciendo también esta banda).

Procesión del Santo Entierro de 1958

En Cáceres desarrolló una importante actividad musical que puede resumirse en su participación como director de la banda, la creación en 1957 de una Orquesta Sinfónica que se presentó en el Gran Teatro con éxito, su nombramiento como profesor del Seminario Mayor de Cáceres y la creación del Orfeón Cacereño en 1964 [3].

La Banda Municipal con Francisco Cebrián. Salón de Plenos del Ayuntamiento de Cáceres 1959.

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[1] http://www.realacademiatoledo.es/files/toletum/0017/toletum17_cebrianbandas.pdf

[2] BOE, en el que se pueden comprobar los nombramientos como directores tanto de Francisco Cebrián de la Diputación de Murcia como de Santiago Berzosa del Ayuntamiento de Lugo.

http://www.boe.es/boe/dias/1969/01/24/pdfs/A01132-01133.pdf

[3] AA. VV.: “Diccionario de la Música Española e Iberoamericana”, (o.c.), Tomo III p. 458.

Jesús-Jesús. Santiago Berzosa

Hoy presentamos una marcha de procesión, tal vez la más conocida de las dedicadas a nuestra Semana Santa Cacereña: Jesús-Jesús de Santiago Berzosa González.

La Banda Municipal de Música de Cáceres, interpreta esta marcha tras el paso de Jesús Nazareno, acompañando su estación de penitencia en la madrugada del Viernes Santo. Se suele interpretar en varios momentos como en los primeros pasos de la procesión por la plazuela de Santiago, el amanecer en los Adarves, o su recogida desde la plaza de Santa María hasta Santiago. La unión de imágen, música y escenario hacen de estos momentos de una belleza inimitable.

Santiago Berzosa, nace el 1 de Mayo de 1907 en Turégano (Segovia), ingresa en la Academia General Militar de Segovia en la que recibe los primeros estudios de solfeo, instrumentos de viento y más especialmente los de clarinete y bombardino, completándo sus estudios de clarinete en el Real Conservatorio de Madrid. Gana posteriormente en sucesivas oposiciones las plazas de músico de tercera, segunda y primera, alcanzando en el año de 1933 el grado de Subdirector de Música Militar. En las oposiciones al Cuerpo de Directores de Bandas Civiles de 1941 es nombrado director de la Banda Municipal de Cáceres, que ya dirigía desde hacía un año, logrando al frente de la misma un sólido prestigio. También dirige la Banda del Regimiento de Infantería Argel nº27 de guarnición en Cáceres. 

De Cáceres pasa a Badajoz durante seis años dirige la Banda del Regimiento Castilla con el grado de Comandante.

En 1960, a instancias suyas, se crea en Cáceres el Conservatorio Elemental de Música, colocándose al frente del mismo impartiendo, además, las clases de armonía hasta su jubilación. De sus clases  en la Banda Municipal, el Conservatorio, el Colegio de San Francisco y la Coral Cacereña que el reorganizó, ha salido un importante número de intérpretes notables. El Conservatorio Profesional de Cáceres en su recuerdo lleva el nombre de “Hermanos Berzosa”, como reconocimiento y dedicación ahora valorada por las nuevas generaciones de estudiantes de e investigadores.

Los Maestros Solano y Berzosa. Fotografía de Juan Guerrero.

 Retirado, dedica su tiempo a la composición, que ha sido una de las grandes pasiones de su vida. 

Muere el 12 de Febrero de 1982 como consecuencia de un accidente de tráfico. 

Santiago Berzosa ha sido uno de los músicos cacereños más productivos en cuanto a composición musical, siendo sumamente importante por la amplitud, riqueza y variedad, destacando por su inspiración en el folclore extremeño y su calidad instrumental. Abarca los géneros sinfónico, para banda (Intermedios, fantasías, suite, sonatas, rapsodias), corales (estampas líricas) música sacra (himnos varios), marchas militares y música ligera. Recordar que los Himnos a Nuestra Señora de la Soledad e Himnos a la Virgen de Alta Gracia fueron premiados en los años 1943 y 1948.  

Una parte manuscrita

La grabación que vamos a escuchar es en Directo, el Viernes de Dolores de 2003 en la Iglesia Conventual de Santo Domingo para la Cofradía de los Estudiantes.

Breve comentario:

El primer tema de la composición se presenta como un diálogo entre los instrumentos más graves y agudos. Comienza con tres notas largas, graves, ascendentes y muy suaves -piano- seguido por una respuesta en notas más ágiles, agudas y descendentes (0´19´´). Durante 32 compases este sencillo motivo se desarrolla en sucesivas repeticiones y variaciones entre unos instrumentos y otros, a diferentes alturas, hasta acabar con ocho compases de entrada sucesiva tres grupos de instrumentos: trompetas y saxofones, instrumentos graves y por último toda la madera (1´15´´) hasta llegar a un matiz fuerte con todos los intrumentos de la banda.

La segunda sección, que se puede denominar "Fuerte de bajos", expone un nuevo tema de ocho compases que se repiten, en los que la melodía, brillante es interpretada por los instrumentos más graves -tuba, bombarino, trombones y saxofones tenor y barítono- sobre un frenético acompañamiento de madera y largas figuras armónicas (1´51´´).

Durante los siguentes 22 compases, se desarrollará esta melodía en distintas voces. Primero con la entrada sucesiva de cuatro melodías -madera, las trompetas, los trombones y las tubas- y después por todas las voces graves, esta vez pianísimo, acompañadas armónicamente por el resto de la banda. Termina esta sección con dos compases conclusivos (2´40´´).

Del ritmo de marcha lenta de la caja surge una saeta (3´12´´) y una fanfarria de metales -repetida por los instrumentos más agudos- conducen la marcha a la última sección (3´55´´).

La última sección sigue una forma clásica de las marchas de procesión con Trío, es decir una sección de 16 compases que primero se interpretan los instrumentos de la familia de madera, en piano, y después toda la banda en fortíssimo, ahora con una nueva melodía o contrapunto que suelen tocar los saxofones y bombardinos.

 Noé Muriel, 2 de Abril de 2012 

Fuentes:

• "Alborada Extremaña - Santiago Berzosa González". Fermín Poza Berzosa, Zaragoza, 1992
• BOE 1976/05/06
• Archivo de la Banda Municipal de Música de Cáceres. 
• Blog Mis Bandas de Música.